domingo, 4 de enero de 2009

LAS DOCE B-UVAS

Barcarrota 31 de Diciembre de 2008.
No hace falta que os contemos que pasó ese día, o mejor dicho esa noche, todos lo vivimos en directo.
La mesa puesta, la familia reunida, las uvas peladas y el repetidor de la televisión estropeado ¡Qué mala suerte! El caso es que la avería no fue repentina, no es que se fuera la señal a las doce menos cuarto de la noche, no, fue a eso de las seis de la tarde cuando se dejó de ver la tele ¿no hubo tiempo desde entonces de solucionar el problema? SEIS HORAS SEÑORES, HUBO SEIS HORAS. Pero no lo hicieron y allí estabamos todos los barcarroteños, como gilipollas, con el transistor en la oreja intentando encontrar una emisora que medio se oyese (porque esa es otra, la señal de radio ¡es una mierda!) para poder escuchar las campanadas…
Y para colmo de males el día de Añonuevo sale el coche de Marabé anunciando a bombo y platillo que el Ayto no ha tenido la culpa de nada, que la empresa encargada de… en fin, bla, bla y más bla. Propaganda y más propaganda al estilo de Hugo Chavés para intentar librarse de la lluvia de críticas que le estaba cayendo ¡Dad la cara coño! Porque hasta donde nosotros sabemos el Ayuntamiento es el que se tiene que hacer responsable de los problemas que surjan en el pueblo, para eso es la máxima autoridad y nuestro gobierno ¿no creen?.
Si esto hubiera pasado cuando el Sr. Alfonso Macías era alcalde no hubieran esperado ni un minuto para pedir su cabeza, ya en la verbena se hubieran oido gritos de “dimisión” y de “sinvergüenza”, ya se sabe, la masa está aleccionada para atacar en cualquier momento ¡A las barricadas!
Hubo otros que si se comieron las uvas… una hora más tarde.

Un saludo a todos y hasta la semana que viene… (al “Tipo del asunto” decirle que no es literal, que no se lo tome tan a pecho)